Nace Contempla Edelvives, un nuevo sello editorial que combina literatura, ilustración y diseño. Una mezcla de códigos y miradas creativas con un único objetivo: la pura creación para el deleite del público adulto. La combinación de autores, ilustradores y diseñadores de reconocido prestigio internacional convierte las obras de este sello editorial en piezas únicas.
Un sello de ediciones limitadas, porque el propósito de Edelvives es ofrecer la experiencia de, casi, el libro perfecto. La editorial nos invita a acercarnos a sus páginas y a sumergirnos “en la sutileza poderosa de sus constelaciones de imágenes y palabras”.
“Porque la belleza complace y atrapa. Atrévete. Contempla”, nos invita Edelvives. Y la invitación la realiza con los dos primeros títulos de este nuevo sello. Dos joyas, sin duda, e igual nos quedamos cortos. Por un lado “Seda”, escrito por Alessandro Baricco e ilustrado por Rébecca Dautremer; por otro, “Amantes”, de Ana Juan.
Seda
“Aunque su padre había imaginado para él un brillante porvenir en el ejército. Hervé Joncour había acabado ganándose la vida con una insólita ocupación, tan amable que, por singular ironía, traslucía un vago aire femenino. Para vivir, Hervé Joncour compraba y vendía gusanos de seda”.
Así se inicia esta obra de Alessandro Baricco que desde su publicación, en 1996, ha contado con el reconocimiento del público y de la crítica. Cuando habla de Seda, Baricco dice que no es una novela sino una historia. Que comienza con un hombre que atraviesa el mundo y que acaba al borde de un silencioso lago. Añade que podría decirse que es una historia de amor. Pero que si solo fuese eso, no merecería la pena contarla.
Ha sido traducida a numerosos idiomas y llevada al cine en 2007, pero es con la recreación visual que lleva a cabo Rébecca Dautremer, que la obra alcanza una profundidad y belleza inimaginables hasta la actualidad.
Amantes
“La música está empezando a sonar. Fiel a nuestra cita estoy, con el corazón a punto de estallar”. Pocas palabras cargadas de propuestas y evocaciones para arrancar una galería de imágenes poderosas sobre el amor y los que aman.
Mientras residía en París, Ana Juan recibe el reto de intentar plasmar en series de ocho imágenes un momento de amor entre dos personas, sin limitaciones, sin concesiones. Segundos, horas, días o años de amor. El proceso de creación fue largo, más de tres años de esforzado trabajo que dieron sus frutos y origen a la primera edición de esta obra que, muchos años después, se lanza de nuevo exquisitamente editada. Porque el amor es también así, cambiante y se presenta bajo múltiples formas: fiel, semanal, volátil, final, diferente, lejano, dormido, orgulloso, efímero, primero, desconocido…
Bares, músicos, ambientes con personajes marginales y amantes. Estos hilos que tejen los contenidos de su obra gráfica en los comienzos de su carrera pasan a ser los protagonistas de esta asombrosa obra que ahora reaparece en todo su esplendor.