Isa Lozano: “El ilustrador tiene que llamar, llamar y llamar a una puerta y a otra, hasta que te abran”

Isa Lozano: “El ilustrador tiene que llamar, llamar y llamar a una puerta y a otra, hasta que te abran”

He quedado con Isa Lozano. No la espero todavía, pero alguien llama a la puerta y cuando ésta se abre, lo que primero llama mi atención es una gran carpeta de esas que se ven mucho en la línea 9 del autobús urbano, que es la que te lleva en Granada a la Facultad de Bellas Artes. Supongo que se trata de ella. Nos sentamos tranquilamente para charlar. A Isa le brillan especialmente los ojos e irradia felicidad cuando habla de los proyectos en los que está inmersa actualmente. Entre éstos, unos ‘dibujillos’ para una empresa de Londres con los Juegos Olímpicos como telón de fondo.

“Ahora lo que estoy haciendo son algunos dibujillos para una empresa de Londres, unas ilustraciones para los Juegos Olímpicos. Estoy también con unas ilustraciones para una escritora de Argentina, esperando que el proyecto salga adelante”.

Para una joven ilustradora freelance no es fácil abrirse camino, nos cuenta, y toca llamar a muchas puertas. La crisis tampoco ayuda mucho.

“El ilustrador tiene que llamar, llamar y llamar a una puerta y a otra, hasta que te abran. Hay un montón de ilustradores, y debes insistir hasta que un día te llaman y te hacen el encargo. Creo que no se valora como debería a los ilustradores. La crisis ha afectado a todo, y a esto también. Todavía es más complicado que te abran puertas. Normalmente las editoriales tienen una cartera de ilustradores más o menos fija, y es difícil que te llamen. Pero bueno, hay que intentarlo”.

Las nuevas tecnologías se abren como un nuevo universo para los ilustradores. Los e-books también entran en sus previsiones.

“Es una salida más para dibujantes e ilustradores, para crear la base de un videojuego, o una simple ilustración para un libro electrónico”.

Isa nos cuenta que en las publicaciones suele haber un equilibrio perfecto entre imagen y texto, pero echa en falta más imagen en los libros destinados al público juvenil.

“Dependiendo de la edad a la que vaya dirigido el libro, a lo mejor lleva una ilustración cada dos páginas, o cada página. Y luego está el álbum ilustrado, en el que la imagen lo domina casi todo. Yo pienso que en este sentido está todo en su justa medida, pero quizá en los libros para un público juvenil pondría más ilustración, a pesar de que lo bueno para ese público sea leer y leer. Pero yo metería más imágenes, porque a partir de los 14 años ya no se dibuja en el colegio, un adolescente no sabe dibujar. Creo que al ver más imágenes, se interesarían más por esa parte”.

No me lo cuenta hasta que hemos terminado la entrevista, pero me llama mucho la atención una de las técnicas o, mejor dicho, uno de los materiales que utiliza en algunas de sus ilustraciones. Se trata de la plastilina. Aún así se siente mucho más cómoda con la acuarela.

“Mis ilustraciones son realistas. En comparación con lo que hoy se hace, yo creo que lo mío es más realista. No tiene un dibujo conceptual, pero me adapto de todos modos a lo que pueda surgir. La técnica que suelo utilizar… la acuarela es con la que más cómoda me siento”.

Isabel es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Granada. Ha impartido clases de dibujo y escultura en la Facultad de Bellas Artes a través de varias becas. Sus ‘grandes ratos’ como ella dice, o ‘su momento’ lo dedica a dibujar e ilustrar.