Arianna Squilloni (A Buen Paso): “En tiempos de crisis hay que repensar. Por eso trato de seguir publicando a buen ritmo”

Arianna Squilloni (A Buen Paso): “En tiempos de crisis hay que repensar. Por eso trato de seguir publicando a buen ritmo”

Desde que supe de la existencia de la editorial “A Buen Paso”, mis pasos me debían llevar a conocer a su ‘hacedora’, Arianna Squilloni. Leí alguna entrevista suya, y cada vez tenía más ganas de poder charlar con ella. Y ese momento tuvo lugar en Valladolid, nada programado, un “aquí te pillo, aquí te mato”, y no podía haber salido mejor.

Fue una charla corta, pero muy distendida. Era la segunda vez que hablábamos (la primera duró apenas 25 segundos en presencia del ilustrador Benjamin Chaud el día anterior), pero Arianna es de esas personas que te hacen sentir como si hablaras con un amigo de toda la vida. Y eso hicimos, hablamos, de libros y de “A Buen Paso”.

“Acababa de perder mi trabajo, pero había estado trabajando en una editorial de libros para niños -nos cuenta Arianna-. Tenía las ideas muy claras. Cuando sabes lo que quieres editar, cómo quieres editarlo y por qué. Hay un montón de editoriales infantiles y la pregunta era, ¿para qué añadir otra? Pero yo lo tenía muy claro, mi idea surgía más de una conciencia del valor emocional y humano de las letras, la ilustración y el arte en el ámbito infantil, cosa que igual está más reconocida en el ámbito de adultos, y a veces se nos olvida en el caso de los niños. Y creo que toda la parte de formación literaria y artística es una parte de formación emocional de la persona y, por lo tanto, esa fue la idea con la que surgió ‘A Buen Paso’”.

La editorial nació en 2008, y luego los primeros libros se publicaron en 2009. La idea inicial era publicar seis libros al año, “aunque luego la realidad…, este año puede que sean nueve. Si todo va según los planes”, asegura Arianna Squilloni.

La editorial ha publicado ya cerca de treinta libros. “Estoy orgullosa de todos, aunque ahora quizá más del último, porque es el más fresco. Estoy perdidamente enamorada de este libro (me enseña “Adiós a la tierra de los colores vivos”). Creo que los cuentos son preciosos. Primero recibí un cuento de este escritor. Hay un ilustrador de Barcelona con el que he trabajado mucho, que me gusta un montón y que creía que era perfecto para esta historia”.

“Está muy bien, me dijo este ilustrador, pero no tenemos un libro, porque es una historia que no se puede ilustrar como un álbum. Volví al autor y le dije, fantástica, escribe al menos tres más. Y así surgió. El ilustrador hizo un trabajo que yo creo que es alucinante. Porque, a veces, el problema de ilustrar novelas o cuentos largos es que las ilustraciones pueden resultar ‘episódicas’, pero aquí ha creado un conjunto que inquieta… Adoro todos los libros, lo que pasa es que este es el último”.

¿Y cómo está la industria editorial? “Está fatal. Es que no se mueve nada. Realmente lo entiendo. Hay un problema, en tiempos de crisis hay que repensar. Por eso en ‘A Buen Paso’ trato de seguir publicando a buen ritmo. Cuando hay crisis la supervivencia es lo más importante. Lo primero que se piensa es que la cultura, la literatura, no son importantes. Yo creo que como sólo tenemos una vida que se acaba relativamente pronto, incluso cuando dura mucho, hay que hacer algo apasionante con ella. Porque sobrevivir no merece la pena, el mundo es un lugar maravilloso. Merece la pena vivir y, entonces, hay crisis, lo entiendo, pero quisiera que las cosas fueran diferentes. Realmente es de los sueños que vivimos”.

Arianna también es autora, y le preguntamos por su libro, “En casa de mis abuelos”. “Es un tema muy íntimo. Es una historia real. No tan bonita, porque yo creo que mi abuelo utilizaba las pizarras porque las tenía a mano, y no quería comprar tejas nuevas porque eran unos almacenes viejos. No es muy poética. Pero hay una cosa que me encanta de los campesinos, que vuelven a utilizar las cosas más allá del uso que les han dado. Nace de esto, de la manera de reutilizar las cosas, de la degradación de las estructuras del campo y cómo se arreglan añadiendo pieza y pieza de otros lados, el reciclaje… Hoy es diferente, y por eso es necesario echar una mirada a eso”.

Y, ¿en qué trabaja ahora la editorial? ¿Qué nos vamos a encontrar en el futuro? “Hay medio millón de proyectos. Hay uno de Alba Marina que está a punto de salir. También una cosa un pelín alocada, que es un libro casi en blanco y negro, “La hierba más verde”, de Olalla Hernández. Todo hecho con fotografías y fotomontaje. Una historia muy peculiar. Hay un montón de proyectos, incluso una novela ilustrada”.

La entrevista ha tenido lugar en el transcurso de IlustraTour, en Valladolid. Le preguntamos a Arianna si hay algún ilustrador o ilustradora con los que quiera realizar algún proyecto. “Ahora mi misión en la vida es encontrar una historia para una ilustradora que he conocido aquí -dice Arianna-. Y hay personas con las que me gustaría repetir. También es bonito estar con la gente que empieza”.